El inicio del tercer día de huelga convocado por los representantes sindicales, comenzó hoy con incidentes de “un intento de boicotear” los servicios mínimos acordados.
Cinco autobuses se han visto afectados por el impacto de piedras y huevos que han causado su retirada inmediata y han tenido que ser reemplazados. Estos incidentes han causado retrasos en el servicio prestado a los usuarios. El ataque más grave ocurrió cuando se lanzaron piedras contra uno de los autobuses asignados rompiendo las ventanas de la puerta trasera.
A pesar de que estos hechos han sido conocidos, el gerente de la EMT Mateu Marcús ha transferido los incidentes a la Policía Local y ha presentado la queja correspondiente. Marcús ha condenado el uso de la violencia sin cuidados paliativos y ha advertido del grave peligro de que tales acciones puedan causar tanto a los usuarios como a los propios trabajadores conducir vehículos que se encuentran en servicios mínimos como resultado de la huelga.
“Lanzar piedras a un autobús en circulación es una imprudencia absolutamente inaceptable que puede tener consecuencias impredecibles”, advirtió.
El gerente insiste en que los representantes sindicales deben poner “sentido común en llegar a un acuerdo que desensaliente innecesariamente para movilizaciones que están tensando innecesariamente las relaciones laborales y causando graves desventajas al público, en medio de una situación de emergencia causada por pandemias”.
No tiene sentido seguir adelante. Hemos cedido y acordado 10 de los 16 puntos que han causado la huelga. Tienen que convocarlo y seguir negociando. Esta situación nos perjudica a todos”, concluye Marcus. Las negociaciones para desmantelar la huelga se reanudarán hoy a las 12 p.m. en la sede de San Fernando.
