Según el periódico digital el Nuevo Día, el más crítico de los escenarios presentado por el canciller Carlos Holmes Trujillo García, a Colombia podría llegar 4 millones de migrantes procedentes de Venezuela, o más con un millonario gasto en el sector social.
Las cifras fueron presentadas por Trujillo García en el marco del foro Desafíos de la migración venezolana, convocado por el diario El Tiempo, la universidad del Rosario, la Fundación Konrad Adenauer y la ONU.
En este encuentro se dejó al descubierto la gravedad de la situación. Trujillo reveló que el gobierno comenzó a alistar un documento Compes (Consejo Nacional de Política Económica y Social ), para el cual se están preparando “cifras preliminares”.
El gobierno maneja tres escenarios posibles: en el primero, si la situación se mantiene como está hoy, Colombia recibiría 2,166,000 migrantes; en el segundo, el menos malo, llegarían 1,850,000, y en el pesimista, llegarían más de 4 millones.
Pero el Canciller no se quedó en los datos, sino que hizo énfasis en la necesidad de avanzar en la armonización del trabajo regional y en la eficacia de la acción multilateral.
Es así como en el marco de esa gestión anunció que va a hacer un recorrido por varios países de la región para trabajar política y diplomáticamente y “crear condiciones” para que Venezuela pueda vivir nuevamente en democracia.
Por su parte, la rectora de la Universidad, Stephanie Lavaux, dijo que “la migración reciente requiere del esfuerzo multilateral” y de acuerdos y medidas conjuntas para enfrentarlo de la mejor manera.
Roberto Pombo, director del diario El Tiempo, manifestó que “estamos ante una situación verdaderamente dramática”, por lo que dijo que vale la pena seguir examinando el contexto porque “va a ser un factor profundamente transformador de las sociedades en todos sentidos”. Pombo advirtió que hay que “tener cuidado de no caer en las tentaciones de brotes xenofóbicos, que cada día se sienten, por fortuna no en Colombia”.
La mayoría de mi familia emigró
Baleares Sin Fronteras estuvo en las calles de Bogotá Colombia, a donde es normal apreciar a varias familias venezolanas, la mayoría con hijos pidiendo ayuda para sobrevivir.
En la calle 153 con autopista, muy concurrida, establecimos contacto con Enrique Fernández, padre de dos niños y una niñas, la más pequeña de apenas once meses.
“Un día decidimos salir del país por la situación que se está viviendo allí. No se consiguen pañales, alimentos, todo escasea. Decidimos subirnos a un autobús hasta llegar a la frontera entre Cúcuta y Venezuela”, afirma Agrega que “las personas de Colombia son muy solidarias, en plena carretera se paró un ángel y nos llevó hasta Bucaramanga. Nos dio posada en su apartamento, nos ofrecio comida y luego de su bolsillo nos pagó un hotel dos días hasta que, como pudimos nos vinimos a Bogotá, gracias a que nos regaló 110.000 pesos colombianos, 35€, para llegar a la capital”.
En su relato dice que “estamos luchando para sobrevivir, buscando un empleo, nos quedamos en una casa en donde estamos pagando un alquiler de lo que reunimos”
Prosigue: “Estamos muy agradecidos con la gente de Colombia, nunca pensé que nos fueran a recibir con los brazos abiertos. Me quedo sorprendido de este país tan avanzado, infortunadamente a mi país lo acabaron. Es malo lo que hicieron con todos los venezolanos. Por culpa de Maduro y del sistema estamos en la pobreza. Mi hermana emigró al igual que todas mis tías y tíos, quedan solo los viejitos que nos cuidan lo poco que tenemos”.